Trabajo remoto humanamente posible

Trabajo remoto humanamente posible

Cuando preparé mi tesis de grado en la universidad, quisimos enfocarla de la manera más práctica, aplicable y útil posible. De hecho, dijimos textualmente con mi compañero de tesis: “algo que no se quede a juntar polvo en la biblioteca”. Claramente, luego de todos los esfuerzos que depositamos, de todos modos el libro quedó en la biblioteca juntando polvo. Pero ese no es el punto.

El punto es que el proyecto consistió en diseñar una plataforma de laboratorios virtuales en la nube con el objetivo de achicar la brecha digital de la educación en el Paraguay (pretenciosos, ¿No?) y nuestra visión era brindar una manera simple y accesible de manera remota para entregar el mismo contenido educativo a los alumnos de cualquier ciudad del país, achicando así la brecha digital.

Ese proyecto de grado perseguía el mismo objetivo esencial que el “trabajo remoto”: seleccionar y utilizar la tecnología adecuada para realizar las actividades que mi lugar de trabajo (casa de estudios) espera de mí.

Hoy, una situación global de salud nos cambia la realidad de la noche a la mañana y plantea el “trabajo remoto” de manera forzosa y muchas personas dudan sobre cómo enfrentar esta situación, e inclusive, si podrán hacerle frente; entonces, les escribo este artículo para comentarles sobre el esquema de trabajo que hemos diseñado, sustentado en las premisas de: personas + procesos + tecnología.

personas + procesos + tecnología

Hoy me toca cumplir el rol de director de InQuality, una empresa de transformación digital de procesos de negocio enfocada a las personas. En la empresa intentamos diseñar soluciones con la misma pasión y visión de aquel proyecto de grado. Con el mismo espíritu innovador y la misma motivación de contribuir a las personas que desean trabajar y salir adelante.

Por ende, las últimas semanas el equipo técnico se dedicó a diseñar un “esquema de trabajo remoto humanamente posible” que sirva de aporte y guía al sector de micro, pequeñas y medianas empresas con herramientas simples y altamente aplicables.

Ahora, es crítico identificar y tener consciencia de los desafíos que propone el trabajo remoto, principalmente porque la necesidad de trabajar remotamente se dio de golpe y debemos seguir produciendo; por ende, no contamos con el tiempo de transición que categóricamente requiere todo cambio.

"¿Cómo nos vamos a comunicar?"

Esto es un cambio de paradigma total; es decir, ya no tenés al compañero de trabajo para preguntarle algo, ya no tenés reuniones con el jefe donde podés escuchar las indicaciones en persona.

"La gente no trabaja estando en su casa"

Es un desafío a la confianza, desde que los supervisores, jefes y gerentes deben confiar en el profesionalismo y diligencia de los colaboradores, así como los colaboradores deben confiar en sus compañeros.

"¿Cómo nos vamos a coordinar?"

Si era difícil asignar las actividades, darles seguimiento y medir la productividad de los equipos de trabajo estando todos juntos en la misma oficina, ahora que no nos vemos parece imposible. No hay texto alternativo para esta imagen

"¿Cómo voy a usar el sistema?"

Esta pregunta abre paso a temas de alto impacto como la conectividad, la seguridad, el acceso a la información, las herramientas tecnológicas y otros.

Como vemos, es un conjunto de cosas. Trabajo remoto categóricamente no es solamente usar la tecnología. La adecuada conjunción entre el cambio de mentalidad de las personas, la adecuación de los procesos para la eficiente asignación y coordinación de actividades y, sobre esas definiciones articular las actividades mediante herramientas tecnológicas. Ahí conseguimos una fórmula ganadora para la implementación de tecnologías en general, más aún cuando hablamos de cambios disruptivos en la operativa de una organización.

Trabajo remoto categóricamente no es solamente usar la tecnología.

Específicamente, en lo que refiere a las tecnologías, existe un mar de soluciones en línea: básicas, integrales, profesionales, gratuitas, pagadas y así siguiendo. Más abajo un gráfico que elaboramos con el equipo (claramente, no están todas) que propone un puntapié inicial para la selección de las herramientas tecnológicas.

Entonces, para poder armar una adecuada estrategia de trabajo remoto en tiempo récord en una empresa una idea es comprar hecho, tomar unas pocas decisiones sobre un plan de trabajo base que esté probado, que funcione y que sea rápidamente adaptable a la empresa.

Eso es exactamente lo que hicimos. Simplificamos los esquemas de trabajo que utilizan grandes compañías, actualizamos nuestro modelo con los mejores tips de los incontables que existen en línea actualmente (recomiendo el artículo de Iván Ferreira que es más que completo) sumada a la bibliografía de nuestros consultores y pre-seleccionamos tecnologías (principalmente gratuitas) para que puedas usarlas YA.

En caso que decidas que podemos darte una mano, lo que haremos es centrarnos en adaptar nuestro modelo diseñado sobre el siguiente conjunto de actividades:

Si pensás que podemos ayudar a alguien con esto, enviale el contacto que seguramente te lo agradecerá. Hoy debemos ser solidarios, compartir el conocimiento y colaborar entre todos para hacer frente a la crisis que nos toca vivir. Por ende, #QuedateEnCasaPy y hagamos del trabajo remoto algo humanamente posible.